Las cosas que fueron Exposición temporal

Un techo de cristal marcaba, no solo en Girona, sino en toda Europa, los límites de la composición para las mujeres. Las piezas dulces y de inspiración melódica eran tratadas con condescendencia por los compañeros varones y las que requerían un desarrollo armónico o instrumental más generoso se consideraban poco adecuadas para la naturaleza de la mujer por ser demasiado viriles. Pero Teresa Suñer traspasó la línea roja y compuso una sardana. Los Pol se convirtieron en toda una institución en Ràdio Girona. Paco Pol entró en la emisora como técnico y realizador después de la guerra. En 1952 se incorporó Jaume Pol, que pronto comenzó a recopilar aparatos antiguos y consiguió una colección muy destacable. Tinet, nacido en 1925, se quedó ciego de muy pequeño. De espíritu alegre y carácter afable, de joven aprendió a tocar el acordeón de botones con el que, al hacerse mayor, acompañaría a los gigantes y los cabezudos durante el Corpus y otras fiestas. Más adelante, con su nuevo acordeón, rojo y reluciente, tocaría El tiro-liro y otros éxitos de la nueva época, cuando las casas del Onyar ya lucían los vivos colores de la democracia.

Volver

• 
• 

El acordeón con el que Agustí López acompañaba a los gigantes, las radios de la colección de Jaume Pol y las partituras de sardanas de Teresa Suñer ofrecen un punto de vista inédito de la ciudad a través de la música. El ejercicio es sencillo. Basta con buscar una nueva frecuencia, un dial que sintonice con la perspectiva de género, el interés por las músicas populares y la curiosidad por explorar los entretenidos márgenes de la historia.